Ministro Molina afirma que la Ley de Hidrocarburos “ha cumplido su ciclo”

La Ley 3058, que formó parte de la política de nacionalización de los hidrocarburos, “ha cumplido su ciclo”, afirmó ayer el ministro del sector, Franklin Molina. En ese contexto, ratificó un anuncio anterior respecto a la elaboración de una nueva norma para el sector.

“Estamos trabajando en la reconfiguración de las normas. Es importante mencionar que las normas no son estáticas, la Ley 3058 (Ley de Hidrocarburos) ha cumplido un ciclo y nosotros estamos trabajando en la modificación de estos esquemas normativos”, dijo a la estatal Bolivia Tv.

Hace dos años, el 24 de mayo de 2021, Molina compareció ante la Cámara de Senadores y fue en esa oportunidad que dijo que estaban trabajando en la modificación de esa ley porque era demasiado burocrática debido a que los proyectos deben pasar dos veces por la Asamblea. La primera, para la otorgación del permiso de exploración y la segunda, para aprobar el contrato, lo que provoca la reticencia de las empresas interesadas en las reservas de país.

La actual Ley de Hidrocarburos está vigente desde el 17 de mayo de 2005, cuando el entonces presidente del Senado Hormando Vaca Díez la promulgó luego del veto que impusiera el entonces presidente Carlos Mesa. Desde entonces ya pasaron 18 años.

Esa ley emergió de la llamada “agenda de octubre” que activó una inédita consulta ciudadana sobre la política hidrocarburífera de esos años, cuando las petroleras tomaban el control de la “boca de pozo”. Esta agenda política nació en 2003, cuando se produjo la renuncia de Gonzalo Sánchez de Lozada a la Presidencia en medio del rechazo a la exportanción de gas a Estados Unidos a través de puertos de Chile.

En 2006, con la llegada de Evo Morales al poder, se produjo la nacionalización de los hidrocarburos y la 3058 no fue modificada.

Molina adelantó también la pronta presentación de un anteproyecto de ley que tiene que ver con el desarrollo de asociaciones de empresas petroleras y otras medidas paralelas que van en el marco de esa política que está llevando adelante el Estado para mejorar las reservas de gas. Asimismo, admitió que durante los últimos cinco años el país vivió una tasa de declinación bastante agudizada de producción de gas.

“Se han ido tomando distintas medidas para campos maduros y campos menores, tenemos como seis contratos que están en aprobación. Por ejemplo, hay los contratos de Charagua, los contratos de otros proyectos que sin duda son parte de este plan de reactivación y que garantizan recursos por parte de YPFB, pero también inversión extranjera”, afirmó.

De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), desde abril de 2022, Bolivia pasó a ser un importador neto de energía. El país comenzó a adquirir del exterior más combustible que el que vende a otros países.

Por efecto de los altos precios de las materias primas, Bolivia exportó, en 2014, gas natural por $us 6.595 millones; ese monto bajó a $us 2.269 millones en el 2021. El economista Gonzalo Chávez hizo notar que en ambos periodos los precios del producto eran casi los mismos a escala global.

Sobre la base de estos datos, especialistas del sector recomendaron ajustes normativos para facilitar las tareas de exploración.

Publicado en: El Deber