PV Magazine.- Las principales empresas del sector ya anunciaron su intención de expandirse: el pasado mes de diciembre, se supo que la Sociedad Química y Minera de Chile (SQM), es el mayor productor de litio del mundo según su portal web, podría estar considerando expandirse a un cuarto país.
Eso era en un momento en el que había exceso en la demanda, pues según el análisis de las propias empresas, la producción de los seis mayores productores de cobre para este año -SQM, Albemarle, Tianqui, Ganfeng, Orocobre y FMC- rozaría las 400.000 toneladas de carbonato de litio equivalente, mientras que la demanda apenas superaría las 350.0000.
Este desequilibrio entre la oferta y la demanda se acentuará aún más a corto plazo: por un lado, en esa cantidad no se ha incluido la producción de empresas más pequeñas, y por otro, la norteamericana Albemarle pretende aumentar su producción entre 2022 y 2024, cosa que también hará la chilena SQM tras el acuerdo firmado con la Corporación de Fomento de la Producción de Chile (Corfo) para finalizar un conflicto por el Salar de Atacama iniciado en 2014. Dicho acuerdo contempla un aumento de la cuota de extracción de litio, pues se otorgaron unas 349.553 toneladas de litio metálico hasta 2030.
En concreto, en 2024 se espera que la producción de la minera chilena alcance aproximadamente las 300.000 toneladas de carbonato de litio frente a las cerca de 60.000 de 2017. Según analistas del sector, la norteamericana Albemarle alcanzaría un nivel similar, mientras que las otras grandes productoras aportarían otras 200.000 toneladas.
Frente a estos datos, desde el mercado proyectan que la demanda, en un escenario medio, rondaría las 700.000 toneladas.
Según analistas del sector, los efectos inmediatos de este escenario sería la reducción del precio del mineral y la salida del mercado de los productores menos establecidos.
Por el momento, ya han bajado las acciones de las principales productoras de litio.

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