En un giro estratégico y comercial en Latinoamérica que podría dejar al país fuera del negocio, Brasil abrió negociaciones para importar gas por 15 años de la Argentina; y la China espera construir el gasoducto para llevar el combustible, informó la cadena de televisión Todo Noticias (TN) de Buenos Aires.

“En estos momentos la Argentina está negociando un preacuerdo con el Brasil para exportar gas por 15 años”, informó la televisora argentina.

¿De qué depende ahora cerrar el negocio? De la construcción de un gasoducto.

Según TN, la inversión China fue la única que despertó interés para emplazar el gasoducto para comercializar el combustible en el Brasil.

Sobre este punto, en las últimas horas autoridades argentinas expresaron satisfacción y alegría debido a que los fondos para garantizar las obras del gasoducto, están garantizados porque gano Joe Biden y no Donald Trump, en los EEUU, ya que si hubiera sucedido lo contrario, el capital asiático no hubiera llegado a la Argentina, por diferencias ideológicas que tiene con la nación del Norte.

“Cuando hablamos del triunfo de Biden, estas ventanas comienzan abrirse, y por lo tanto, existe la posibilidad de que esto se concrete”, apuntó la televisora.

De esta manera por primera vez en décadas, Argentina podría volver a convertirse en un Estado exportador de gas natural, y dejar a Bolivia lejos de esa cualidad, que hoy padece de producción adecuada y suficiente del energético para cumplir contratos firmados con el Brasil, comentaron especialistas en la televisora Río Platense.

Pero ¿qué yacimiento en potencia descubrió Argentina para producir gas para exportar?

Vaca Muerta. Así llaman en la nación vecina el reservorio más importante que tienen, no solo de gas, sino también, líquidos.

El avance en el desarrollo de Vaca Muerta no solo ha permitido compensar la caída de la producción convencional, sino también engrosar el stock de reservas del país a medida que fueron evolucionando la tecnología de perforación y complementación de pozos y la curva de aprendizaje de las compañías petroleras.

En los últimos años, a medida que las petroleras han avanzado en el conocimiento y en el perfeccionamiento de la técnica para incrementar la productividad de Vaca Muerta, buena parte de sus recursos comenzaron a pasarse a reservas.

Según datos de la Secretaría de Energía de la Nación en Argentina, las reservas comprobadas de petróleo no convencional al final de la vida útil de los yacimientos de Neuquén alcanzaron en 2019 los 107,2 millones de m3, el 88,6% del total si se suman las aportadas por las formaciones convencionales (120,9 millones de m3).

El año pasado, registraron un notorio salto, del orden del 82%, en comparación con 2018, cuando fueron 59 millones de m3. El dato pone de manifiesto la decisión de las compañías de concentrar el grueso de sus inversiones en la explotación del shale oil, en detrimento de los yacimientos gasíferos, por las condiciones del mercado.

Mientras que las reservas comprobadas de gas no convencional de Neuquén ascendieron a 180.350 millones de m3 (MMm3), el 79,4% del total (226.921 MMm3). En comparación con 2018, crecieron un 33,9%.

Gas al litoral

Argentina abrió también la posibilidad de saldar una deuda histórica que tiene con provincias del Norte y el litoral, que hasta ahora carecen de provisión permanente y segura de gas natural.

Durante 2019, los yacimientos no convencionales neuquinos representaron el 26,3% del total de las reservas comprobadas de petróleo (407,4 millones de m3) y el 45% de las de gas de la Argentina (400.231 MMm3).

Otro de los datos a tener en cuenta para evaluar la performance de la industria petrolera es el Índice de Reposición de Reservas (IRR), que muestra el grado con el que la producción del año ha sido reemplazada mediante la adición de reservas comprobadas, por nuevos proyectos, respecto de las del año anterior. Según un reciente informe de Ecolatina, el IRR de la Argentina durante 2019 fue del 125% para el petróleo y del 107% para el gas.

El aumento en las reservas comprobadas de gas está vinculado a los programas de incentivos implementados, particularmente la resolución 46/2017. Los yacimientos que más reservas incorporaron fueron Fortín de Piedra (Tecpetrol), Aguada Pichana Oeste y Aguada de Castro (PAE), Aguada Pichana Este (Total), La Calera (Pluspetrol), La Amarga Chica y Loma Campana (YPF).

El incremento en la actividad de perforación y desarrollo de pozos de gas alcanzó niveles récord a mediados de 2019 y colmó la capacidad de transporte en invierno.

Fuente: Bolivia Energía Libre