Gobierno atribuye la caída de ingresos a bajo precio del crudo
El viceministro de Presupuesto no admitió la caída de la producción de la que hablan reportes oficiales. Dijo que hasta 2014 el precio era de $us 90 y hoy sólo 50.
El Gobierno atribuyó la rebaja en 10,7% de los ingresos por regalías e Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) para el próximo año al descenso del precio del petróleo durante los años anteriores.
El viceministro de Presupuesto y Contabilidad Fiscal, Zenón Mamani, explicó que entre 2013 y 2014 la cotización internacional del barril de petróleo estaba encima de 90 dólares, pero a partir de ese último año a caído por debajo de los 50 dólares.
“Ustedes saben que los ingresos que percibimos por concepto de venta de gas responde a factores externos del precio del petróleo. Si los precios bajan, también caen los ingresos”, precisó en entrevista con medios estatales.
Página Siete informó ayer, con base en el proyecto de Presupuesto General del Estado (PGE), que los recursos por el IDH el siguiente año llegarán a 5.625 millones de bolivianos, inferior en 679 millones de bolivianos al monto proyectado para el presente año, que fue de 6.304 millones de bolivianos.
El proyecto de PGE 2022 en el Tomo I consigna el valor de regalías por hidrocarburos que se prevé generar y que alcanza a 3.163,8 millones de bolivianos, inferior en 382,3 millones de bolivianos respecto a los 3.546,1 millones de bolivianos previstos para la presente gestión.
Mamani explicó que en el PGE siempre se trata de ser conservadores en las proyecciones porque el precio del petróleo es muy volátil y por eso es que para 2022 se programaron los ingresos por hidrocarburos con una cotización promedio de 50 dólares el barril de crudo.
“Pero a la fecha la cotización del petróleo está en 70 dólares y la anterior semana se encontraba en 80 dólares, es volátil. Si el precio está encima los ingresos suben y si cae, también lo hacen los ingresos”, recalcó la autoridad.
Pero no solo caen los precios, sino la producción de gas natural por el agotamiento de los yacimientos, elevado consumo y falta de mayor exploración, según los expertos.
Datos oficiales del Ministerio de Hidrocarburos reflejan que en 2014 el país producía 61,33 millones de metros cúbicos día (MMmcd), el año pasado eso bajó a 43,52 MMmcd y a julio de este año se logró 46,21 MMmcd.
Cotizaciones a la baja
Los precios del petróleo tuvieron el viernes su peor jornada en 17 meses, golpeados de lleno por el surgimiento de una nueva variante de coronavirus, que arroja dudas sobre la trayectoria de la economía mundial.
El barril de West Texas Intermediate (WTI) para entrega en enero perdió 13,06% en Nueva York a 68,15 dólares. El WTI es de referencia en Bolivia.
Desde abril de 2020, cuando llegó a tener precios negativos, no se observaba una caída de tal magnitud. El WTI volvió en una jornada al nivel de cotizaciones de inicios de septiembre.
El movimiento está directamente vinculado al descubrimiento en Sudáfrica de una nueva variante de coronavirus, bautizada como ómicron por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que la calificó de “preocupante”. “Incluso sin restricciones drásticas” susceptibles de limitar la propagación del virus, “las personas serán más prudentes y eso pesará sobre la demanda” de crudo, estimó Michael Lynch, presidente de Strategic Energy & Economic Research (SEER).
Varios países europeos y Estados Unidos suspendieron el viernes los vuelos provenientes del sur de África para tratar de contener el avance de ómicron.
“Estoy sorprendido por la envergadura de este descenso, porque es todavía muy pronto para saber cuál será el impacto y si las vacunas serán o no eficaces”, comentó el analista. Según las agencias Reuters y Bloomberg, la OPEP y sus aliados en el seno de la Opep+ planean modificar su calendario de aumento de producción en reacción a la aparición de esta nueva variante.
“El próximo año, estamos hablando del 2022, la inversión para todo lo que es exploración y explotación, de alrededor de 400 millones de dólares (…). Podríamos hablar de que los ingresos por renta petrolera durante la gestión estarían superando los 2,100 (millones de dólares), lo cual es una buena noticia”, aseveró, en el programa Las 7 en el 7 de Bolivia Tv, según ABI.
Según Molina, la inversión programada permitirá trabajar en proyectos importantes que son parte de un plan exploratorio para mantener el nivel de producción de hidrocarburos. Asimismo, explicó que la estrategia hará posible superar la explotación de gas natural con miras al 2025, para garantizar el desarrollo de varios proyectos de industrialización actuales y otros que están en cartera.
La renta petrolera cayó el año pasado en 29,6% y para este año, el Gobierno proyectó alcanzar 1.918 millones de dólares de ingresos, con la premisa de aumentar la producción de gas, obtener mejores precios del petróleo y gas natural, y mayores exportaciones hacia Brasil y Argentina. Pero a este último mercado se incumplió.