China podría iniciar una nueva revolución en materia de energía nuclear

La energía nuclear sigue siendo una de las fuentes de energía más controvertidas del planeta, pero tiene algunas ventajas clave, especialmente en la lucha mundial contra las emisiones. Y China apuesta a lo grande por un futuro nuclear, con el objetivo de poner en marcha más de 150 nuevos reactores en los próximos 15 años.

Nadie parece ponerse de acuerdo sobre la energía nuclear. La opinión científica está dividida sobre si la energía nuclear puede o no salvar al mundo del cambio climático, y la opinión pública está dividida sobre si la energía nuclear es una alternativa energética segura y limpia o una peligrosa bomba de relojería a la espera de fundirse y esparcir la lluvia radiactiva por sus patios.

La Unión Europea está completamente dividida sobre este tema mientras Escocia acoge la Cumbre del Clima COP26 en Glasgow. Alemania se opone firmemente a la energía nuclear y está en proceso de eliminarla por completo, a pesar de que la energía nuclear representaba casi un tercio del mix energético del país desde el año 2000. Mientras tanto, un grupo de 10 países de la Unión Europea, con Francia a la cabeza, está haciendo un llamamiento para que la energía nuclear sea un elemento clave de la política climática de la UE.

El mes pasado, Francia envió una carta a la Comisión Europea en la que aboga por la consideración de la energía nuclear como “fuente de energía clave, asequible, estable e independiente” que podría proteger a los consumidores de la UE, que actualmente sufren la crisis energética, de verse aún más “expuestos a la volatilidad de los precios”. La carta fue apoyada por Bulgaria, Croacia, República Checa, Finlandia, Hungría, Polonia, Eslovaquia, Eslovenia y Rumanía. La mayoría de estas 10 naciones ya dependen de la energía nuclear para una parte considerable de su mix energético nacional.

En agosto, la Comisión Económica para Europa de las Naciones Unidas (United Nations Economic Commission for Europe, UNECE, por sus siglas en inglés) publicó un informe tecnológico en el que se argumentaba que la energía nuclear podría ser clave para alcanzar los objetivos fijados en el acuerdo climático de París y en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible: “La energía nuclear es una importante fuente de electricidad y calor con bajas emisiones de carbono que puede contribuir a alcanzar la neutralidad del carbono y, por tanto, a mitigar el cambio climático”, declaró la Secretaria Ejecutiva de la UNECE, Olga Algayerova, al publicar el documento.

La energía nuclear ya ha contribuido a evitar aproximadamente 74 gigatoneladas de emisiones de dióxido de carbono en los últimos 50 años, que de otro modo se habrían liberado por el uso de combustibles fósiles. De hecho, se ha calculado que la energía nuclear ha salvado 1,8 millones de vidas que, de otro modo, se habrían perdido por causas relacionadas con la contaminación atmosférica derivada de la combustión de combustibles fósiles, y del carbón en particular.

Otros estudios muestran que la energía nuclear puede no ser en absoluto la respuesta a la mitigación del cambio climático. Un artículo publicado en la revista Energy Policy en agosto de este año sostiene que la capacidad de energía nuclear instalada es sencillamente demasiado pequeña en la actualidad -y sigue reduciéndose- y será demasiado difícil de ampliar para tener algún tipo de futuro viable tras la transición energética, gracias a “obstáculos técnicos y recursos limitados”.

De hecho, la mayor parte del mundo se ha alejado de la energía nuclear, que puede ser extremadamente cara y se asocia más a menudo con desastres de alto perfil como las tragedias de Chernóbil, Fukushima y Three Mile Island.

Sin embargo, uno de los únicos países que cuenta con un plan sólido y viable para el desarrollo nuclear es China, que “planea generar una cantidad impresionante de energía nuclear, de manera rápida y a un coste relativamente bajo”, según un reciente informe de Bloomberg.

Pekín planea poner en marcha 150 nuevos reactores nucleares en los próximos 15 años, lo que supone más capacidad nuclear que la que ha construido todo el mundo en los últimos 35 años. “El esfuerzo podría costar hasta 440.000 millones de dólares; ya a mediados de esta década, el país superará a Estados Unidos como mayor generador de energía nuclear del mundo”, escribe Bloomberg.

Se trata de un acontecimiento especialmente importante para China, dada la magnitud de la huella de carbono del país, la mayor del mundo. También es un desarrollo que sólo China podría lograr. “Sería el tipo de transformación energética al por mayor que las democracias occidentales -con limitaciones presupuestarias, voluntad política y opinión pública a tener en cuenta- sólo pueden soñar”, califica Bloomberg el plan.

De hecho, puede que China sea el único país del mundo capaz de reunir los importantes recursos necesarios para ampliar la energía nuclear con tanta rapidez que acabe con la opinión de que el renacimiento nuclear será “demasiado poco y demasiado tarde”.

Publicado en: World Energy Trade