¿POR QUÉ LLEGAN TANTOS CHINOS A PANAMÁ Y POR QUÉ HAN PUESTO EN PROBLEMAS AL GOBIERNO?
BBC. Es un movimiento inédito en Panamá que une a representantes de abogados, sindicatos, profesionales y artesanos, entre otros. La razón: se oponen a la regularización de miles de ciudadanos chinos, emprendida por el gobierno de ese país desde el pasado 3 de junio.
Muchos llegaron con empresas chinas que operan en la región, y otros atraídos por proyectos mineros y de construcción en Panamá.
Su regularización es ilegal, dicen los opositores, y además representa unacompetencia desleal a trabajadores panameños y de otras nacionalidades con documentos en regla.
Las autoridades argumentan que se trata de proteger a muchos extranjeros que viven casi en la clandestinidad y que suelen padecer abusos laborales o familiares.
En el fondo, coinciden especialistas, las protestas revelan dos problemas que no han logrado solucionarse en el país: las dificultades de Panamá para establecer un efectivo sistema migratorio y la creciente llegada de personas provenientes de China, la mayoría de forma irregular según los activistas.
BBC Mundo solicitó al Ministerio de Seguridad Pública y al Servicio Nacional de Migración entrevistas para hablar sobre las protestas, y para conocer las razones del decreto presidencial.
También pidió un posicionamiento a representantes de la comunidad china de Panamá. No hubo respuesta en ninguno de los casos.
Historia
La migración china a este país tiene más de 160 años, cuando un grupo de 750 personas llegaron para ayudar en la construcción de ferrocarriles.
Y en 1914 hubo otra oleada importante con la excavación del Canal de Panamá.
A lo largo del siglo pasado se mantuvo un flujo constante de inmigrantes, quienes crearon una de las colonias chinas más importantes de Latinoamérica.
De hecho algunos estudios señalan que hasta el 6% de los 3,5 millones de panameños tienen origen o algún vínculo familiar con esta población.
Sin embargo, en los últimos años se presentó una creciente oleada de trabajadores provenientes de China.
Una de las razones es la mayor presencia de capitales asiáticos en la región, no sólo en Panamá sino en Costa Rica o Nicaragua.
De hecho en último país una compañía china obtuvo una concesión para construir un segundo canal inter oceánico en territorio centroamericano.
Y en el caso panameño muchos trabajadores chinos pretenden laborar en los nuevos proyectos mineros, especialmente en la extracción de cobre.
Uno de ellos, Mina Cobre Panamá, pretende contratar hasta 7.000 trabajadores. El 24% de ellos son extranjeros, incluidos originarios de China
Estadísticas
No se sabe cuántos migrantes provenientes de China han llegado en los últimos años, aunque se cree que son varios miles.
El censo de 2010, por ejemplo, reveló que había 14.158 extranjeros nacidos en de ese país. Ahora se estima que son más de 20.000.
Por esta razón el presidente Juan Carlos Varela Rodríguez emitió el 3 de junio dos decretos extraordinarios para regularizar a los extranjeros que viven sin documentos migratorios en regla en el país.
Uno de ellos, el 168, se refiere exclusivamente a los ciudadanos chinos.
El Colegio Nacional de Abogados, sin embargo, dice que es ilegal, porque contraviene las leyes de migración vigentes en el país.
“No puede venir un decreto menor, como en este caso del Ejecutivo, a hacer un proceso de regularización por encima del marco de la ley”, le dice a BBC Mundo María Isabel Saravia, presidenta de la Comisión de Migración del Colegio.
El decreto presidencial establece sólo algunos requisitos para obtener un permiso de dos años para residir legalmente en el país.
Entre ellos se encuentra presentar recibos de pago de impuestos, inscribirse y pagar varias cuotas de seguridad social y presentar comprobante de domicilio.
El pasaporte es un requisito pero también se puede presentar una declaración jurada de alguna persona que conozca al solicitante. Otra de las condiciones es presentar una carta de antecedentes criminales y pagar US$2.500
La abogada Saravia dice que la regularización de miles de ciudadanos chinos representa una competencia desleal a los trabajadores regulares.
“No va a trabajar el que más capacitado esté, nacional o extranjero, sino el que menos va a cobrar, el más vulnerable”, explica.
Problemas
Las regularizaciones migratorias en Panamá no son nuevas.
En los últimos años los distintos gobiernos establecieron los programas conocidos como “Crisol de Razas”, una jornada de varios días donde los extranjeros en situación irregular podían legalizar su estancia en el país.
No está claro el número de personas beneficiadas con este programa. El subdirector del SNM Miguel López Cedeño dice que fueron 57.000, aunque otros mencionan una cifra mayor.
El entonces presidente Ricardo Martinelli dijo que no habría más jornadas como éstas.
Pero ahora los críticos al nuevo programa de regularización dicen que en el fondo se trata de un crisol de razas con nombre distinto.
La medida tampoco fue consultada, asegura Rebeca Yanis, secretaria de la junta directiva de la Asociación de Profesionales de Panamá
“Se lanzaron sin consultar los decretos que atentan contra los derechos y la seguridad de los trabajadores panameños“, le dice a BBC Mundo.
Además, señala Isabel Saravia, del Colegio de Abogados, la forma como se emitió el decreto presidencial puede beneficiar a las bandas de esclavitud laboral y sexual.
“Panamá se encuentra en lista gris de trata de personas y estamos en nivel de vigilancia mundial sobre el tema”, explica.
“Los chinos son una muy buena migración en materia de trabajo pero son víctimas de trata de personas, por eso no tienen sello en el pasaporte porque entran por puntos sin control”.
Sin embargo, el subdirector de Migración asegura que ahora se establecieron medidas adicionales al analizar los expedientes de cada solicitante.
“Si hubiera algún caso de trata lo investigaríamos de inmediato”, le dijo el funcionario a medios locales.
Por lo pronto, el Colegio Nacional de Abogados solicitó a la Corte Suprema de Justicia la derogación de los decretos de regularización migratoria.
El proceso se resolverá en los próximos meses.
Fuennte: BBC