Indígenas de Venezuela denuncian abusos de militares y minería ilegal

Indígenas amazónicos de Venezuela han condenado al Ejército porque no combate la minería ilegal de oro y diamantes en sus tierras. Los militares fueron acusados de crear un “clima de terror, miedo y zozobra” y por inflingir “vejámenes y humillaciones” a la población indígena.

Algunos militares son conocidos por estar implicados en el tráfico ilegal de oro, arrendar equipo minero y controlar el acceso a las minas ilegales.

Los indígenas también han denunciado a un comandante que quemó las casas de indígenas que habían denunciado a los militares.

Kuyujani, una organización que representa a los indígenas yekuanas y sanemas que viven a lo largo del río Caura en la Amazonia, ha presentado una queja ante el Fiscal General en relación con el fracaso del ejército de frenar la galopante minería ilegal.

Según Kuyujani, la minería ha destruído la salud de los indígenas. En 2013, unos investigadores encontraron que el 92% de las mujeres indígenas que viven a lo largo del río Caura tenían niveles de mercurio más altos que el límite internacionalmente aceptado, y que un tercio de ellas presentaba un alto riesgo de que sus hijos recién nacidos padecieran desórdenes neurológicos.

El auge de la minería ilegal se incrementó dramáticamente desde 2006 y el año pasado el Gobierno anunció que planeaba abrir grandes extensiones de minería legal que incluían tierra indígena. Los campamentos mineros han expuesto a los jóvenes indígenas al alcohol, las drogas y la prostitución.

A pesar de que la Constitución de Venezuela reconoce el derecho de los pueblos indígenas a sus tierras ancestrales, muy pocos indígenas han recibido un título colectivo de sus territorios.