Avasallan una comunidad leco para explotar oro
Crearon pueblo ‘fantasma” para simular consulta
La comunidad Michi Playa de la Tierra Comunitaria de Origen (TCO) Pueblo Indígena Leco Larecaja (Pilcol) ha sido avasallada por gente que busca explotar el oro que existe en ese lugar, ubicada en el municipio de Guanay del departamento de La Paz.
El informe corresponde a la Central de Pueblos Indígenas de La Paz (CPILAP), que además inició un proceso a los avasalladores del lugar, quienes aseguran ser propietarios de la zona.
La responsable de la secretaría de Género y comunaria de Michi Playa, María Ayhuana, dijo que iniciaron en 2013 un proceso penal contra quienes irrumpieron en su territorio.
El abogado que tomó el caso, Óscar Martínez, explicó que los demandados no se presentan y dilatan el proceso, que ya pasó al Tribunal Agroambiental (TA).
Martínez afirmó que el caso puede ser resuelto en la justicia indígena y con ello se puede expulsar a los invasores, pero decidieron llevarlo a justicia ordinaria.
“La comunidad Michi Playa está pasando por uno de sus peores momentos con respecto al avasallamiento de tierras (…) estamos tratando este caso en los estrados judiciales, pero no nos costaba nada expulsarlos como parte de la justicia indígena, sin embargo, los hermanos lecos son pacíficos y vamos a resolver este caso por las buenas”, declaró a Erbol.
Pueblo “fantasma”
Los avasalladores, que inicialmente eran cuatro personas y ahora son 50, alegaron tener origen indígena y se identificaron como hijos y nietos de los lecos que dejaron la comunidad hace más de 40 años en busca de trabajo en el exterior.
La dirigente Ayhuana reconoció que son parientes de los indígenas que abandonaron Michi Playa, pero dijo que no quisieron acomodarse a la organización y forma de vida de esa población, menos afiliarse, por lo que ingresaron a la zona por la fuerza.
“No quisieron ser parte de la comunidad y han empezado a conformar una cooperativa minera para sacar el oro de forma independiente y eso ya no le gustó al pueblo porque esos recursos nos pertenecen a todos”, declaró a Erbol.
Los avasalladores sumaron fuerza y se aliaron a la organización de colonizadores para crear otra comunidad dentro de Michi Playa, con el nombre de Santiago Pata. Conformaron la cooperativa Sar Inti Luz de América y lograron la concesión Limpo, que se sobrepone al territorio de los lecos.
“Se ha notificado a la cooperativa y esta cooperativa al no querer llegar a algún tipo de acuerdo con la comunidad es que se decide apelar a una resolución que nosotros habíamos conseguido en una primera instancia, por la cual habíamos salido victoriosos, vale decir que se reconocía la ilegalidad de la concesión Limpo por no respetar la consulta y como no nos consultaron a los pueblos indígenas salimos victoriosos”, afirmó.
Simulación de consulta
Creada la comunidad “fantasma”, se aprovechó para la simulación de una consulta a los mismos avasalladores. “Ellos apelaron y en su apelación, presentan una certificación de consulta a una comunidad denominada Santiago Pata de Michi Playa ajena a la comunidad de Michi Playa, entonces ahí es donde comienza de verdad el conflicto porque una vez que nosotros en la segunda instancia decimos que esa comunidad no existe, porque no acreditó nunca su existencia con una personería jurídica, volvemos a ganar el proceso”, indicó.
A pesar de que los indígenas ganaron en dos oportunidades, se vino una tercera apelación, pero esta vez ante el Tribunal Agroambiental, donde se presentó el caso de la retención de posesión mediante la comunidad Santiago Pata. Según Martínez el proceso volvió a cero porque se anularon los obrados.
“Quieren consolidar ese territorio movidos por la concesión minera, los demandamos para recuperar el territorio, pero ellos impugnan a cada momento y la justicia no nos da la razón”, finalizó Martínez.