Las energías renovables pueden reemplazar a los combustibles fósiles para el año 2050
En un nuevo informe pionero titulado Revolución Energética 2015, realizado por Greenpeace Internacional, el Consejo Mundial de Energía Eólica y Solar Power Europe, antigua EPIA se nos muestra en 364 páginas el camino hacia un sector energético impulsado por energía 100% renovable, ya que con ello se demuestra que es posible prescindir completamente de los combustibles fósiles y abastecerse solo de energías limpias y renovables en el año 2050.
El escenario de esta Revolución Energética 2015, o algo muy parecido, es el necesario si es que queremos tener una posibilidad razonable de cumplir con la meta acordada de mantener el aumento de la temperatura media global del planeta por debajo de los 2 ° C.
Faltando ya menos de tres meses para ir a la Cumbre del Clima de París, los líderes mundiales tienen la oportunidad de dar los primeros pasos críticos para combatir el cambio climático, mediante la aceleración de la transformación constante del sector de la energía del mundo con los combustibles fósiles y hacia el 100% de energía renovable para mediados de siglo.
Según Steve Sawyer, secretario general del Consejo Mundial de Energía Eólica, ahora tenemos tecnologías competitivas que pueden resolver la mayor parte del problema climático, o sea las emisiones de dióxido de carbono del sector energético. Lo que se necesita ahora es la voluntad política para poner en práctica las políticas adecuadas y las medidas fiscales y regulatorias para ponerlas en práctica en su totalidad.
Por otro lado, y según Sven Teske de Greenpeace, autor principal del informe, el viento y las tecnologías solares tienen actualmente un coste competitivo con respecto al carbón. Es muy probable que estas superen a la industria del carbón en términos de puestos de trabajo y en energía suministrada en la próxima década”.
El escenario de la Revolución Energética 2015 muestra cómo esta transformación es posible y cuánto costaría, así como su impacto en el empleo en el sector energético. El informe actualiza anteriores escenarios de la revolución de la energía, y por primera vez ofrece un escenario avanzado con un suministro de energía 100% renovable, así como proporcionar una extrapolación actualizada con las políticas actuales del escenario del World Energy Outlook de la AIE, todo ello a efectos comparativos. Un análisis detallado del informe muestra que la transición hacia el 100% de energías renovables para el año 2050, podría crear millones de nuevos puestos de trabajo y ahorrar dinero.
De hecho, la inversión necesaria quedaría más que cubierta con los ahorros futuros en costes de combustibles, ya que para realizar estos cambios, sería necesaria una inversión que estaría más que cubierta por el ahorro generado en los futuros gastos en combustibles. Por un lado la inversión adicional promedio necesaria en energías renovables hasta el año 2050 sería de aproximadamente 900.000 millones de euros al año, mientras que como las energías renovables, que no requieren de gastos en combustibles, el ahorro en ese mismo tiempo, sería de unos 950.000 millones de euros al año, suficientes para cubrir la inversión necesaria, con el punto de equilibrio entre el 2025 y el 2030.
En este informe de Revolución Energética 2015, la mayor fuente global de energía a nivel mundial para el año 2050 sería la energía eólica, suministrando alrededor del 30% o 32% respectivamente.
La industria eólica por sí sola podría emplear a 8 millones de personas en 2030, casi 10 veces más que en la actualidad (que es casi el doble de personas empleadas en la actualidad por las industrias de petróleo y gas), y para el caso de la industria fotovoltaicas, se podría emplear a 9,7 millones de personas para 2030 en todo el mundo, diez veces más que en la actualidad.
Dentro de 15 años, la participación en la generación de electricidad con energías renovables triplicaría el panorama actual, pasando del actual 21% al 64%, cubriendo casi dos tercios de la demanda mundial de electricidad. En países con un rápido desarrollo de energías renovables, como Brasil, China e India, las emisiones de CO2 podrían bajar en un tercio, desde las actuales 30 Gt generadas al año, a 20 Gt para el año 2030.
De mayor importancia, sin embargo, es la reducción de las emisiones globales de CO2, y llegar a cero emisiones en el sector de la energía no va a resolver todo el problema climático, aunque es con mucho el mayor desafío, debiendo por lo tanto ser el objetivo principal del trabajo de los gobiernos para la cumbre del clima de París a finales de este año, gobiernos que tendrán que gestionar el desmantelamiento de la industria que se está quedando obsoleta, orientando a la industria de los combustibles fósiles, para que se preparen paulatinamente, y siendo conscientes que cada euro invertido en proyectos de combustibles fósiles, es un coste hundido, según ha declarado Sven Teske, investigador de Greenpeace.
Además, hay que tener cuidado de no dejarse influenciar por la presión ejercida por los intereses creados por la industria de los combustibles fósiles, para que no se interpongan en el cambio de las energías renovables, que son la manera más eficaz y más justa de tener un futuro energético limpio y seguro, debido a sus costes de inversión.
Por su parte Kumi Naidoo, director de Greenpeace Internacional, ha instado a todos los escépticos, que dicen que no se puede hacer, a que lean este informe y reconozcan que se puede hacer, que se debe hacer y que será para el beneficio de todos.
Esperemos por lo tanto, que en la Cumbre del Clima de París, se tengan avances, que nos permitan ser optimistas con respecto a la evolución de nuestro futuro energético.