Gobierno busca sustituir con GLP el diésel para el agro y transporte
La iniciativa tiene como objetivo reducir la subvención a este carburante
El Gobierno tiene un plan para sustituir con Gas Licuado de Petróleo (GLP) hasta el 30% del diésel que consumen los grandes agricultores, principalmente cruceños, y lo vehículos de transporte pesado. La idea es reducir gradualmente la subvención a ese carburante en el país.
Según datos oficiales, la producción de GLP en plantas gasíferas, refinerías y las plantas de separación de líquidos Río Grande (en funcionamiento) y Gran Chaco “Carlos Villegas” (que comenzará a operar el primer trimestre de 2016), además de garantizar el abastecimiento del mercado interno, permitirán la exportación de un excedente de al menos 1.200 toneladas métricas del carburante a países vecinos.
“La inserción del GLP en el agro y el transporte pesado —los sectores más importantes de consumo de diésel (el 40% del total nacional)— es una política de cambio de matriz energética a ser implementada en el corto plazo”, informó a La Razón el viceministro de Industrialización, Comercialización, Transporte y Almacenaje de Hidrocarburos, Álvaro Arnez.
Con esta política, que se apoya en los excedentes garantizados del combustible para los próximos años, en su bajo costo y en su elevado poder calorífico, se puede reducir en principio “entre el 20 y 30%” del consumo de diésel en ambos sectores, explicó.
“YPFB garantizaría el abastecimiento del GLP requerido por el agro más allá de 2021 — cuando los volúmenes exportados de GLP de la planta “Carlos Villegas” se redireccionarían a la planta de propileno para la producción de plásticos — y los empresarios del sector adoptarían nuevas tecnologías para que sus maquinarias usen como combustible una mezcla de diésel con GLP, de manera de atenuar los volúmenes importados de diésel”, sostuvo Arnez, quien anunció que primero el Ejecutivo iniciará conversaciones con los empresarios del agro.
“Habría que analizar la propuesta”, afirmó al respecto el presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Julio Roda, quien recordó que el agrícola es el cuarto sector que más consume diésel en el país.
Para el presidente de la Cámara Boliviana de Transporte Pesado (CBTP), Fidel Baptista, el principal obstáculo para implementar esta iniciativa es el económico.
“Nos gustaría. ¿Por qué no? Seguro ahorraríamos bastante, pero eso costaría una fortuna, estamos hablando de entre $us 15.000 y 20.000 para cada camión. Y ¿quién va a invertir eso?”, expresó el dirigente, quien agregó que cada uno de los aproximadamente 15.000 camiones de alto tonelaje afiliados a la CBTP consume entre 850 y 950 litros de diésel en un solo viaje de Cochabamba a Arica (Chile).
“Estas políticas progresivas no se podrían implementar sin la toma de decisión del sector privado”, sostuvo el viceministro, quien destacó que el uso de GLP para la generación de electricidad en sistemas aislados donde no se puedan implementar proyectos de energías alternativas reduciría también el consumo de diésel y el subsidio a este carburante, que en este año representa el 90% de lo presupuestado para este fin ($us 450 millones).
Mercados para el GLP
Cinco países
Con el inicio de operaciones de la planta “Carlos Villegas”, Bolivia podrá exportar GLP a nuevos mercados como Brasil, Argentina y Uruguay e incrementará los envíos del carburante a Paraguay y Perú, dijo Achá.
Importación de gasolina se suspende este año
Bolivia podrá abastecer este año toda la gasolina especial que demanda el mercado con el inicio de operaciones de dos plantas, una de isomerización en Santa Cruz y una de reformación catalítica en Cochabamba, informó ayer el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Guillermo Achá.
“Estas dos plantas van a producir este año 40 millones de litros adicionales de gasolina especial para abastecer el mercado interno”, sostuvo el ejecutivo.
El proceso de construcción de la nueva Unidad de Reformación Catalítica que se instaura en la Refinería Gualberto Villarroel, se inició el 12 de septiembre de 2014 de manera simultánea con la Nueva Unidad de Isomerización en la Refinería Guillermo Elder Bell.
Los equipos y materiales fueron fabricados en Corea, España, Estados Unidos, China, Italia, Bélgica y Argentina, entre otros.
El presidente de YPFB recordó que la petrolera estatal ha venido haciendo importantes inversiones en sus plantas de refinación con nuevos equipos y mejoras en su capacidad de procesamiento.
“De tener una capacidad de procesamiento de 40.000 barriles por día, hoy estamos en un promedio de 64.000 barriles”, precisó.