Entre 2015 y 2021, Bolivia importó 1.285,3 toneladas de mercurio y en 2021 Rusia fue el principal país proveedor. Datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) y elaborados por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) revelan que en siete años el valor importado fue de 44,1 millones de dólares.

Esta sustancia se emplea principalmente en la explotación de oro y sale de contrabando a países vecinos que han prohibido su uso por la alta contaminación que provoca en suelos y ríos.

En 2021 se internaron 106,1 toneladas, en 2020 otras 165,1 toneladas y 216,1 toneladas en 2019 (ver cuadro).

 El año pasado se adquirió un valor de 5,2 millones de dólares, de Rusia se importaron 65,1 toneladas por  3,1 millones de dólares.

La presidenta de la Comisión de Tierra y Territorio del Senado, Cecilia Requena, opinó que las cantidades que importa el país son significativas y tienen como destino la explotación  de oro que es controlada por las cooperativas auríferas.

Como comparación, dijo que en Minamata, en Japón, entre 1931 y 1968 se virtieron 27 toneladas de desechos de mercurio.

A partir de la contaminación de esa bahía es que los países suscribieron el Convenio de Minamata, que entró en vigor en 2017 y del cual es parte Bolivia. El mismo busca la reducción en el uso de mercurio por el daño que provoca en la salud y el medio ambiente.

Requena sostuvo que el país como Estado no hizo seguimiento al convenio y más bien aumentó la importación de esa  sustancia, que de acuerdo con estudios del Cedib también sale de contrabando a Perú y Brasil. Estos países  cumplen compromisos y tienen reglas estrictas para la internación y comercialización de mercurio.

Tampoco hay control de la Aduana en Bolivia. “En el trabajo de fiscalización, hemos enviado peticiones de informe escrito  a cinco entidades y a la Aduana se le preguntó si hay control y la respuesta fue que no se controla la importación, ni la comercialización de mercurio”, puntualizó Requena.

Añadió que el control es una de las medidas que se sugiere al Estado y un plan de reducción de esta sustancia tóxica.

El expresidente de la Comibol   Héctor Cordova explicó que Bolivia se convirtió en un puente de los países exportadores de mercurio para que se interne a Perú, Brasil y otros que han restringido sus importaciones.

Para producir una tonelada de oro se emplea entre tres y cuatro toneladas de mercurio. “En 2019 hemos pasado de 40 toneladas de producción de oro y es uno de los años de mayor importación de mercurio”, precisó.

Remarcó que la Aduana es la entidad llamada a controlar el ingreso y salida de esta sustancia que es fácil de esconder, aunque tiene gran peso.

El investigador del Cedla  Alfredo Zaconeta sostuvo que si el método de producción es óptimo se llega a producir una tonelada de oro con el uso de dos o tres toneladas de mercurio.

Si se revisa la importación  de  165 toneladas de mercurio  el años 2020 la producción de oro tendría que ser de 55 toneladas, pero sólo llegó a 23 toneladas del mineral.

“Eso significa que una parte del mercurio se desvía a Brasil o Perú, que por el convenio de Minamata ya no  importan, o la otra explicación es que hay una producción desmedida de oro que no se controla y registra en el país”, observó.

Publicado en: Página Siete