Los Tiempos • La planta de urea cumplirá un año de paralización y sin señal de reapertura

A casi un año de la paralización de la planta de urea y amoniaco, ubicada en Bulo Bulo, en el trópico cochabambino, el Gobierno no ha podido reanudar operaciones, pese a haberse comprometido a hacerlo en agosto de este año.

La factoría paralizó obras desde octubre, tras los conflictos electorales de 2019, pero el nuevo Gobierno determinó que su funcionamiento no era rentable y planteó su traslado a Santa Cruz. Tras las protestas de varias instituciones cochabambinas, las autoridades del Ministerio de Hidrocarburos se retractaron y anunciaron la reanudación de operaciones en diferentes fechas, pero ninguno de los anuncios se cumplió.

El pasado 4 de septiembre, YPFB lanzó dos licitaciones para contratar consultores que realicen estudios de mercado para la exportación a países de Sudamérica y venta interna del fertilizante. El proceso terminará el 30 de este mes y la institución presupuestó 177.172 dólares, informó El Deber.

En 2018, la urea representaba el 15 por ciento del total de las exportaciones del departamento. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), procesados por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), entre enero y abril de 2019, la exportación de urea había generado 9 millones de dólares por la exportación de 41 millones de kilos a Argentina, Brasil y Cuba. En el mismo período de este año sólo se exportaron 20 millones de kilos, lo que representa un valor de 4 millones de dólares y un bajón del 50 por ciento.

En toda la gestión 2019, se exportaron 305 millones de kilos de urea a los mismos tres países mencionados por más de 75 millones de dólares.

Ante la falta de producción propia, el país pasó de ser exportador de urea a importador. Hasta abril de este año, el país había importado más de dos millones de kilos de urea, por las que pagó 841.748, pero en 2019 el país sólo había importado 732.068 kilos por los que pagó 294.676 dólares.

El director de Desarrollo Industrial Energía e Hidrocarburos de la Gobernación de Cochabamba, Moisés Quispe Copa, explicó que el Ministerio de Hidrocarburos planteó una reingeniería para la planta de urea, que no fue socializada y la Gobernación desconoce si se la puso en marcha.

Explicó que una de las atribuciones de la Gobernación es el control y monitoreo de las actividades hidrocarburíferas del departamento, por lo que se solicitó informes escritos a YPFB y al Ministerio de Hidrocarburos, pero a la fecha la Gobernación no tiene respuesta.

Copa explicó que además hay denuncias de despidos injustificados de la planta.

Tampoco hay información por parte del Ministerio de Hidrocarburos de los contratos de exportación que se vieron afectados por el paro de planta de urea. También había contratos de exportación para 2020 que no se cumplieron.

Fuente: Los Tiempos