La producción industrial cayó sorpresivamente en mayo en Estados Unidos, en gran parte porque las actividades de manufacturas y mineras continuaron mostrando debilidad, en una señal de que un dólar fuerte y los recortes de gasto siguen restringiendo el crecimiento económico.

La debilidad del sector productor de la economía contrastó con los datos alentadores de ventas minoristas, empleo, consumo y confianza de las pequeñas empresas, que han apuntado a una aceleración del crecimiento tras un flojo comienzo del segundo trimestre.

«La producción está bajo presión por los bajos precios del petróleo, que afectan a la minería, y de un dólar fuerte, que afecta al sector manufacturero. De cara al futuro, la producción probablemente se estabilice cuando la industria petrolera recupere su ritmo», dijo Chris Low, economista jefe de FTN Financial en Nueva York.

La producción industrial cayó un 0,2 por ciento el mes pasado tras retroceder un 0,5 por ciento en abril, informó el lunes la Reserva Federal. Las mediciones han sido débiles desde diciembre, y los economistas esperaban que la producción creciera un 0,2 por ciento.

La débil producción industrial probablemente llame la atención de los funcionarios de la Fed en la reunión de política monetaria del martes y el miércoles de esta semana, opinaron varios economistas.

La producción industrial fue moderada en mayo por una caída del 0,2 por ciento de la producción manufacturera, golpeada en los últimos meses por una apreciación del dólar que ha erosionado las utilidades de las corporaciones multinacionales.

Desde junio del 2014, el dólar se ha apreciado alrededor de un 13,2 por ciento contra las monedas de los principales socios comerciales de Estados Unidos.

El sector manufacturero, que representa un 12 por ciento de la economía de Estados Unidos, fue lastrado además por un descenso en la producción de bienes no durables como alimentos y productos petroleros. Es probable que siga estando débil en los próximos meses.