A partir de julio —con el inicio de operaciones de la Planta de Separación de Líquidos Gran Chaco-Carlos Villegas Quiroga— y hasta fin de año, Bolivia obtendrá unos $us 100 millones por la exportación de gas licuado de petróleo (GLP).

El anuncio lo hizo ayer el ministro de Hidrocarburos y Energía, Luis Alberto Sánchez, luego de la reunión de gabinete en el Palacio de Gobierno. “Gran Chaco entra en operación a partir de junio, en julio vamos a exportar 1.200 TM de GLP, vamos a tener unos ingresos más o menos de 100 millones de dólares en lo que resta (del año), ingresos nuevos por concepto de GLP”, complementó.

El 28 de noviembre de 2014, tras la inauguración de la reunión de Ministros de Industrialización del G77+China, realizada en Tarija, el difunto presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Carlos Villegas, indicó que las operaciones comerciales de la planta se iniciarían el primer trimestre de esta gestión.

Respecto al destino de la producción de GLP de ese complejo, ubicado en el municipio de Yacuiba de Tarija, Villegas indicó en ese entonces que “hay un tiempo de margen que es hasta el 15 de marzo de 2015 para asegurar la negociación (para la exportación)”.

Este complejo tendrá una capacidad de procesamiento de 32,19 millones de metros cúbicos día (MMmcd) de gas natural para producir 3.144 toneladas métricas diarias (TMD) de etano (un insumo principal para el proceso de industrialización de los hidrocarburos), 2.247 TMD de GLP, 1.044 barriles por día (BPD) de isopentano y 1.658 BPD de gasolina natural, según datos de YPFB.

Esta planta de Yacuiba tendrá tres funciones: la extracción de líquidos del gas natural, generar excedentes de GLP para exportar y dotar de materia prima para el complejo petroquímico. El complejo será seis veces más grande que la Planta de Separación de Líquidos Río Grande de Santa Cruz.