La capacidad de almacenamiento en EEUU se acerca a su tope

El récord en los inventarios de crudo estadounidense alcanzado en lo que va de año amenaza con llenar los tanques del país. Las reservas, en máximos de 80 años, llegaron a los 459 millones de barriles (MMb) de stock en la semana del 13 de marzo, después de diez semanas consecutivas de crecimiento. De continuar con estos niveles, la capacidad de almacenamiento del país podría verse desbordada en pocos meses y podría provocar una nueva caída de los precios, así como problemas de suministro, advierte en su informe mensual  la Agencia Internacional de la Energía (IEA por sus siglas en inglés).

 

El exceso de oferta de petróleo es particularmente elevado en Cushing, Oklahoma, que  está a un 77 por ciento de su capacidad frente al 27 por ciento registrado en octubre de 2014, según la Administración de Información de Energía de Estados Unidos (EIA). Cushing es además del mayor centro de almacenamiento en tierra del país, un importante punto de comercio de crudo por situarse en una red de oleoductos. Sus 71 MMb de capacidad de almacenamiento representan alrededor del 19 por ciento del total de EEUU.

 

El aumento de la producción estadounidense es el principal responsable de esta situación, registrando también máximos históricos (9,4 MMbd en la semana del 13 de marzo), a pesar del drástico descenso de la perforación en el país desde diciembre de 2014 hasta los 825 taladros activos. Este ritmo de crecimiento, que no se veía desde 1972, se enfrenta a una débil demanda, que no se espera que pueda absorber todo el petróleo que sale de los pozos norteamericanos. Los analistas de Goldman Sachs anticipaban la semana pasada que el límite de la capacidad de almacenamiento podría alcanzarse este junio, mientras que otras fuentes apuntan al mes que viene.

 

Evolucion_OK“Eso, inevitablemente, llevará a una nueva reducción de los precios”, augura la IEA. Ya en marzo se ha observado una caída desde los 50 dólares por barril de West Texas Intermediate (WTI) registrados el 9 de marzo hasta los 43,4 dólares del día 16, tras un comienzo estable a principios de mes. Parece que los precios han repuntado algo en esta última semana, marcando los 48,06 dólares el barril el 23 de marzo, pero los inversores siguen preocupados por el incremento de los inventarios.

 

La respuesta de los productores de EEUU a la caída de precios está tardando en llegar, en opinión de la IEA, pese a que la producción de shale solo es rentable desde 40 dólares, según analistas. Pero la agencia alerta de que si se rebasa la capacidad de almacenamiento, el efecto en el suministro podría ser “abrupto”.Ante esta situación la industria petrolera lleva meses pidiendo al Gobierno que anule la prohibición de exportar crudo vigente desde los años 70, para aliviar el exceso de oferta interna.

 

Mientras, Arabia Saudí sigue firme en su postura de no recortar la producción, generando un mercado inundado, por lo que muchos países han contratado a compañías de almacenamiento como Vopak NV o Kinder Morgan, para guardar el petróleo a la espera de que los precios se recuperen.