Costos, potencial y perspectivas de la Biomasa en Argentina

El Reporte Ejecutivo del Sector Eléctrico elaborado por la Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER) analiza con números el negocio en nuestro país. ¿Cuál es el costo de generación? Un informe con datos duros, que muestra la conveniencia frente al gasoil importado utilizada para generación de energía eléctrica.

 

Capítulo Bioenergía

Se puede operar con centrales de biomasa de baja potencia de hasta 10 MW con un factor de uso superior al 80% anual. Con una distribución territorial absolutamente competitiva con las centrales “delivery”, se sustituiría el uso de Gasoil por biomasa renovable con una mejor calidad de prestación y servicio, mediante motores de alta eficiencia capaces de utilizar biocombustibles.

 

Los mismos podrían ser accionados por productos del procesamiento de biomasa, como aceite vegetal, o gases sintéticos, entre otras alternativas en motores reciprocantes o turbinas de vapor de pequeño módulo.

 

La biomasa distribuida logra, como combustible, un costo por MMBtu muy competitivo frente al Gasoil: mientras que el costo de la biomasa es del orden de los 4 USD/MMBtu, el Gasoil es de 26 USD/MMBtu sin impuestos (723 USD/m3). Aproximadamente, de estos 4 USD/MMBtu, 1,5 USD/MMBtu representa el costo de la biomasa; 1,5 USD/MMBtu, la mano de obra para convertirla en un combustible disponible y 1 USD/MMBtu, el transporte.

 

En síntesis, además de producir más de 6 veces de ahorro en el costo de combustible, la biomasa provoca un gran impacto socio económico en la región donde se instala.

 

Este tipo de centrales con pequeñas turbinas de vapor o motores reciprocantes,  provistas por empresas que ya se encuentran en el mercado argentino, pueden entrar en funcionamiento en tiempos similares a los de una central térmica diésel y responder a la urgencia del sector con costos muy convenientes.

 

CADER ha propuesto en el trabajo interinstitucional de Escenarios Energéticos 2035 la incorporación relevante de vectores bioenergéticos, tanto en el sistema eléctrico como en la red hoy abastecida por gas natural.

 

Biogás:

Instalación de hasta 2.000 MW de generación con Biogás que consumen aproximadamente 15 MMm3/d.

Se espera que, al final del período de análisis, la superficie afectada para la producción de Biogás sea de aproximadamente 4 millones de hectáreas (45 MMm3/d de biometano, de los cuales 30 MM se inyectarían a gasoductos mientras que los otros 15 MM se consumirían en generación eléctrica con Biogás).

 

Biomasa:

Se ha considerado la recuperación de residuos agrícolas y también la producción extensiva, como se detalla:

 

10 millones de has x 2 tn/ha = 20 MM tn de biomasa seca, a 0.8 kg/kWh, que equivale a 3.500 MW de potencia a partir de cultivos bioenergéticos extensivos

(solo 10% del área semiárida/subhúmeda del país que actualmente no se utiliza para agricultura).

 

2.000 MW de biomasa residual.

Total: hasta 5.500 MW de biomasa.

Las centrales que utilizan bioenergéticos ofrecen potencias bajas en el mercado argentino actual. Para el caso de biomasas lignocelulósicas, podemos considerar centrales que van desde los 3 MW a los 10 MW, y para el caso de Biogás, en el orden de los 500 kW a 2 MW.

 

Estos tamaños de centrales implican que los costos de operación y mantenimiento afectan fuertemente el costo de generación. En el caso de centrales de biomasa, debemos tomar como base 130 a 140 USD/MWh como costo de generación. En el caso de Biogás, complementado con cultivos energéticos, actualmente se puede considerar 180 a 200 USD/MWh, debido a la ínfima escala del despliegue.

 

Sin embargo, las ventajas competitivas y comparativas del sector primario argentino permiten suponer una convergencia con los costos de las Energías Renovables más dinámicas como fotovoltaica y eólica cuando se amplíe la instalación según nuestra propuesta.

 

Estos costos son mejores que los de las centrales térmicas distribuidas, y comparables con los de ciclos combinados. Las mini centrales que proveen generación de base o firme pueden entrar en operación en 12 meses desde su definición, brindando además interesantes alternativas de desarrollo regional vinculado con la producción agrícolo-ganadera.