Basteiro dice que la compra de gas fue una decisión “política”
Condecoraron al embajador saliente de Argentina
Según el diplomático saliente, la política bilateral entre ambos países se modificará con el nuevo gobierno de Mauricio Macri.
El embajador de Argentina en Bolivia, Ariel Basteiro, aseguró ayer que la decisión de comprar gas a Bolivia fue una definición “política”, con el objetivo de contribuir con la administración gubernamental de Evo Morales.
“Se incluyó un elemento político, se incluyó, obviamente que sí. Que fue también una decisión política de comprarle gas a Bolivia y ayudarle a impulsar la tarea y el trabajo de Bolivia, para ayudarle a resurgir y ponerse en funcionamiento”, respondió el diplomático, después de ser condecorado con el Cóndor de los Andes por la Cancillería de Bolivia, según ANF.
Afirmó que el nuevo Gobierno de su país, encabezado por Mauricio Macri, dejará de comprar gas a Bolivia para buscarlo en mercados más baratos.
Basteiro, designado en 2012 embajador en Bolivia por la presidenta saliente Cristina Kirchner, sostuvo que sus previsiones se basan en dos lógicas: la primera es el criterio del nuevo Gobierno de bajar el consumo de energía y la segunda, la visión comercial de buscar un carburante más barato que el boliviano.
“El gas que se compra de los barcos gasificadores del Medio Oriente o de Trinidad & Tobago tiene precio menor al gas que se compra a Bolivia y Juan José Aranguren, que es el próximo ministro de Energía, planteó que el gas que hay que comprar y el precio que hay que buscar debe ser menor”, aseguró.
Agregó que quedan en duda los recientes acuerdos que se firmaron en Tarija, sobre el intercambio de energía eléctrica, que establecen la construcción de la línea de transmisión Yaguacua- Tartagal mediante la cual se deben integrar los sistemas eléctricos de ambos países.
El otro convenio tiene que ver con la transferencia de 440 megavatios producidos por represas bolivianas al sistema interconectado argentino y el desarrollo conjunto de un programa de medicina nuclear con tecnología argentina.
Precisó que cuando el gobierno de Néstor Kichner decidió reabrir las relaciones comerciales sobre el gas con Bolivia no sólo fue porque su país necesitaba del energético del país, sino por una política de integración, cooperación y hermandad, fundamentalmente.
Los mercados
Argentina y Brasil son los principales mercados para el gas natural boliviano y representan el 18,3 % y 28,7 % de las exportaciones totales, respectivamente.
En promedio, a Argentina se envían 14 millones de metros cúbicos día (MMmcd) y 31 MMmcd a Brasil.
En este último trimestre, la estatal argentina Enarsa, que firmó un contrato de compraventa con YPFB, paga 4,8 dólares por millón de BTU, mientras que Brasil cancela 4,3 dólares por el mismo volumen, según datos del Ministerio de Economía.
Las tarifas se ajustan trimestralmente en función de las variaciones del precio del petróleo.
Según el contrato suscrito con Argentina, el envío de volumen debe llegar a un máximo de 27 MMmcd hasta 2027, cuando concluirá el convenio.